Música en familia “PETRUSHKA”

Sábado 05 Abril 2014. 18:30 
Sala Iturbi.



ENTRADAS

ORQUESTA DE VALENCIA       

Yaron Traub, director
Rob Barendsma, dirección  escénica y coreografía
Hilde Koch, coreografía
Con la participación de 50 actores-bailarines de Educación Secundaria
Edad recomendada: a partir de 11 años.

Entre la realidad y la fantasía, el triángulo de amor y celos del Moro, la Bailarina y el Títere Petrushka en el teatrito de un Carnaval ruso. Intriga, exotismo y muerte, en el ambiente colorista y perturbador de una feria con ecos orientales.
¿Qué es Petrushka?

Petrushka  es un ballet en un acto y cuatro escenas compuesto por Igor Stravinski, por encargo del creador de la Compañía de los Ballets Rusos, Sergéi Diaghilev, y con coreografía de Mikhail Fokine. Fue compuesto entre 1910 y 1911 aunque su versión definitiva data de 1947. Se estrenó en el Teatro del Châtelet por los Ballets Rusos de Serguéi Diáguilev, el 13 de junio de 1911 y bajo la dirección musical del Pierre Monteux. Los otros dos famosos ballets que componen la trilogía de Stravinski son El Pájaro de Fuego y La Consagración de la Primavera.
Personajes
Petrushka tiene cuatro personajes principales: el propio Petrushka, un muñeco polichinela que después cobrará vida; la Bailarina, el Moro y el Mago. La acción transcurre en una especie de feria callejera en San Petersburgo. Un mago dirige un teatrito ambulante y dentro de su teatro, hay tres “marionetas”: la Bailarina, el Moro y Petrushka.


Argumento y partes
I Escena. Fiesta popular de la semana de Carnaval

Una gran plaza. Multitudes de gentes pasean: gente común, aristócratas, borrachos, niños que juegan. Aparecen músicos y bailarines callejeros. Un Mago con un teatrito. Se abre el telón y hay tres marionetas. El mago los encanta con su flauta para que bailen.

II Cuadro. En casa de Petrushka

Petrushka descubre sentimientos y emociones humanas a través de la música del Mago. Se enamora de la Bailarina pero ella se asusta de su brusquedad y huye.

III Cuadro. En casa del moro.

La Bailarina se enamora del Moro, lujosamente vestido. Petrushka los encuentra juntos y tiene un arrebato de celos.

IV Cuadro. Fiesta popular de la semana de Carnaval

Es de noche, la fiesta está en su punto culminante. El Moro persigue a Petrushka y lo mata. El Mago asegura que sólo es una marioneta, pero al final del ballet el espíritu de Petrushka sobrevuela burlón el techo del teatrito.


¿Qué vamos a ver y a escuchar?
-       Unos 50 jóvenes entre 13 y 15 años, estudiantes de ESO, dan vida al ballet, desempeñando cada papel de forma colectiva. Un grupo de chicas serán las bailarinas, otros el Moro, otros Petrushka y, todos juntos, son también feriantes y gentes que se encuentran en este mercado callejero multicolor.

-       El director escénico lo llama “teatro en movimiento”: no hay texto. Los diálogos se “escuchan” con la música, de enorme expresividad y se “ven” a través de los movimientos de los 50 participantes.

-       Todo ello bajo la dirección musical de Yaron Traub, Director Titular de la Orquesta de Valencia, la dirección escénica del músico holandés Rob Barendsma, y la participación de la coreógrafa Hilde Koch. Barendsma y Koch, afincados en España, tienen una gran experiencia en el trabajo escénico con adolescentes. El concierto dura 40 minutos y está dirigido a un público a partir de 10-12 años.

Acerca de Petrushka
El fundador de los ballets rusos, Diaghilev había encargado a Stravinski una danza que describiera los ritos paganos de la Rusia Prehistórica. Pero Stravinski decidió escribir algo muy distinto. Él mismo lo cuenta en su Autobiografía:
“Antes de encarar La Consagración de la Primavera, que sería una obra larga y difícil, quería refrescarme componiendo una pieza orquestal en la que el piano desempeñara la parte más importante. Tenía clara la imagen de un títere al que súbitamente se le confiere vida, exasperando la paciencia de la orquesta con cascadas diabólicas de arpegios. La orquesta toma represalias con estallidos de trompeta. (…)
Después de acabar la pieza, busqué un título durante horas. Un día salté de alegría. Había encontrado finalmente mi título: Petrushka, el héroe inmortal  y desdichado de todas las ferias de todos los países… Poco después Diaghilev vino a visitarme y se sintió enormemente sorprendido cuando, en lugar de los bosquejos de La Consagración,le toqué la pieza Petrushka. Estaba tan emocionado con ella que no podía dejarla de lado y se empeñó en convencerme para que desarrollara el tema de las penurias del títere y las convirtiera en un ballet completo”.

El “acorde Petrushka”
Petrushka es una de las composiciones más populares del siglo XX. Parte del atractivo emana de sus melodías fáciles de cantar. Muchas de ellas surgen de valses austriacos, canción francés de music hally también del folclore ruso. El acorde más  famoso, el llamado acorde Petrushka, es una combinación de triadas en Do mayor y Fa sostenido mayor, que se oyen primero en los clarinetes, justo al empezar la segunda escena. Es una sonoridad estridente que representa en realidad los insultos que dirige Petrushka al público de la feria.

El musicólogo Gonzalo Badenes escribió: “Con Petrushka se liquida toda filiación neorromántica, Stravinski abandona para siempre el cromatismo, se afirma el ritmo como elemento primordial, se establece un nuevo espacio más allá de las estructuras polifónicas: las líneas melódicas aparecen emparentadas, no interdependientes (como es lo propio del contrapunto) actúan como espejos deformantes, de manera paralela unas veces, otras asincrónicamente”.

La Compañía de Ballets Rusos y Stravinski
Sergei Diaghilev, nacido en Rusia, fue el fundador y director artístico de la Compañía de Ballets Rusos.  Situó a la compañía en la vanguardia absoluta de la danza, desde 1909 hasta 1929. Aunque su base técnica siguió siendo la tradicional, Diaghilev rompió con todos los convencionalismos musicales coreográficos y escénicos del siglo XX.  Reunió a pintores, escenógrafos y músicos en un proyecto coherente y lleno de modernidad. De entre los músicos escogidos por Diaghilev, el que más unido estuvo a su espíritu y evolución fue sin duda Igor Stravinski.  Stravinski tenía 28 años cuando Diaghilev le encargó El Pájaro de fuego, después Petrushkay después La Consagración de la Primavera.   

El Pájaro de Fuego yPetrushka   La Consagración de la Primavera;  son la trilogía de ballets que ha marcado definitivamente la música clásica del siglo XX.   El encuentro de Stravinski con Diaghilev fue decisivo y selló el destino musical y la gloria del compositor a través de estos tres ballets escalonados.

Diaghilev hizo el encargo del primer ballet (El Pájaro de Fuego) a Stravinski cuando éste tan sólo tenía 28 años. El papel principal fue ofrecido a la mítica bailarina Anna Paulova, quien lo rechazó.  Lo bailó Tamara Karsávina, a la que Diaghilev dijo, refiriéndose al joven Stravinski: "Fíjate en él; es un hombre que va a ser famoso”.

Stravinski no sólo fue el compositor principal para Sergéi Diaghilev de los Ballets Rusos, sino que también colaboró con Pablo Picasso (Pulcinella, 1920), Jean Cocteau (Oedipus Rex, 1927) y George Balanchine (Apollon Musagete, 1928).
Vaslav Nijinsky, bailarín y actor

Diaguilev reunió a los talentos de la época para producir el ballet Petrushka: la puesta en escena y escenografía de Alexandre Benois; coreografía de Mikhail Benois; Pierre Monteux, director de la Orquesta; vestuario de Anisfield y, entre los bailarines, las grandes figuras de la época: la Karsavina, Orloff, Cechetti y Nijinsky. A la orquesta le pareció una música muy difícil y a los bailarines les costaba seguir los ritmos irregulares, pero el éxito fue total. Nijinsky estuvo espectacular en su papel de Petrushka, la marioneta, hasta  tal punto que  la gran actriz Sarah Bernhardt afirmó: “Tengo miedo, tengo miedo… porque acabo de ver el más grande actor del mundo”.

Después del estreno triunfal en París la compañía fue de gira por Europa y EEUU. La compañía necesitaba doce vagones de ferrocarril para transportar la escenografía, el vestuario y el equipo técnico.



La Música… y todas las demás Artes

Sergéi Diaghilev fue productor y mecenas. Su objetivo fue llevar la danza rusa por toda  Europa. Apostando y arriesgando por los artistas más vanguardistas de la época. Diaghilev y su equipo dieron la vuelta al mundo de la danza: renovaron la escenografía, los vestuarios, la gráfica, el concepto del baile en sí mismo. Sus mejores bailarines, Nijinksy y Massine fueron coreógrafos con apuestas muy interesantes, alejadas  de la tradicional ejecución. Cada bailarín era un intérprete y transmitía su sensualidad a través de la danza.




Invitó a artistas emergentes a participar en este sueño, colaborando en la escenografía y el vestuario. Picasso, Juan Gris, Jean Cocteau, Matisse, Natalia Goncharova, Larjonov, Braque, De Chirico e incluso Coco Chanel participaron en sus espectáculos y emprendieron una forma nueva y transversal de hacer arte.

Es en ese contexto en el que Diaguilev descubre el talento de Stravinski. Abierto a las vanguardias, buscando la provocación, Diaghilev pedía a los bailarines que continuasen el espectáculo “ocurriese lo que ocurriese durante la función”. El gran acierto de Diaghilev fue fusionar la música, la danza y el arte. Auténtico visionario, al mismo tiempo empresario y creador, Matisse dijo de él: “Es encantador y exasperante a la vez. Es una auténtica culebra. Lo único que cuenta para él son los   negocios”
Enlaces complementarios de interés para uso del profesorado

RYTHM IS IT?           
Simon Rattle. Filarmónica de Berlín.

PINA BAUSCH. La Consagración de la Primavera. 1975 http://www.youtube.com/watch?v=aSBpQcu61tg
El Pájaro de Fuego en FANTASÍA 2000. Walt Disney http://www.youtube.com/watch?v=668ibeD9-RY